Como ganar al Monopoly

Hoy me he levantado con ganas de trasmitir al mundo toda mi sabiduría, que todo hay que decirlo, no es poca. He creado una nueva sección en el blog y todo, así que imagináos como de exultante estoy.
Para comenzar la nueva sección, os voy a enseñar el truco de uno de los juegos de mesa más populares y conocidos del mundo: el Monopoly

Comenzar diciendo que, aunque hay muchos y variados monopolys, sólo existe uno bueno: el español y con las calles de Madrid. Vamos, el que hay en mi casa. Lo demás, mierda

Bueno, a lo que iba. La táctica del Monopoly es sencilla: hay que desplumar al resto de participantes. Ahora os paso a detallar cómo hacerlo:

1) Es conveniente empezar tirando el primero, parece una tontería pero es bastante importante
2) Dejaos de mierdas de estaciones, compañías del agua y electricidad. Eso no vale para nada. Nunca las compréis
3)Hay veces que es conveniente caer en la cárcel, sobre todo cuando hay muchas casas puestas por el rival. Hay gente que juega con la estúpida norma de que cuando caes en la cárcel no puedes cobrar por propiedades. Algo totalmente injustificado y que no se adapta a la vida real.
4)La clave es sencilla: Hay que intentar sobre todas las cosas, conseguir uno de los cuatro lados del tablero, es decir todas las calles que hay desde una esquina hasta la inmediatente al lado. Sin embargo, no todos los 'barrios' del Monopoly valen igual. De hecho y, en contra de lo que la mayoría de la gente piensa, no por ser las calles más caras y conseguir más dinero cada vez que caen en ellas, son más importantes los barrios. Paso a explicarme

Con este pedazo de gráfico que he hecho yo mismo con Photoshop me explico

Color amarillo: es el barrio donde las casas son menos costosas de poner y por tanto, donde hay menos beneficios al caer. Sin embargo, es el segundo mejor barrio de todos, ya que se consigue poner hoteles muy rápidamente y puedes pegar buenos 'sartenazos'

Color naranja: es el barrio más caro. Casi imposible de conseguirlo entero. Es muy bueno si compras el Paseo del Prado y la Castellana combinados con las dos primeras casillas de la zona amarilla (Ronda de Levante y Lavapies) porque te hacen una esquina mágica. Sin embargo, al costar mucho las propiedades y las casas, es como digo, muy difícil que resulte rentable. Es el tercer barrio en importancia

Color rojo: Es el peor de todos. Las propiedades y las casas valen mucho y los beneficios no son tan grandes como la inversión. Nadie ha ganado una partida al Monopoly con este barrio. Es un hecho probado y demostrable

Color verde: El mejor barrio sin duda. Si consigues reunir las seis calles eres ganador de la partida. Barato y rentable, es la clave para conseguir la victoria

Si seguís mis consejos, jamás nadie os ganará aeste juego. De nada

El amor

La última revisión del libro ya ha sido mandada. Ya está todo listo para que se publique. Aún no se saben fechas concretas pero en breves espero poder daros más información. Hoy os dejo un fragmento muy corto de él. Un trozo de pocas líneas de las más de cuatrocientas páginas que tendrá. Espero que os guste

"...El amor te abraza o te estrangula. Es correspondido o no, pero es perfecto en cada una de sus formas porque es la expresión máxima de nuestra condición de seres humanos. Es lo que nos une y da algo de sentido a este loco mundo. Por amor se mata y se muere. Por amor se muere y se pude revivir. Por amor un loco se vuelve cuerdo y un cuerdo pierde la cabeza. Es irracional pero siempre lleva la razón. Lo es todo. Es la prueba de que estás vivo. Es nuestra aspiración meta final. Es la medalla de oro. Nada te falta si tienes amor..."

El grupo que se curraba los videoclips

Os traigo fresquito fresquito, un vídeo que me he encontrado por ahí. Se trata de un videoclip de un grupo (Ok Go) algo excéntrico, que se dedica a hacer videoclips no menos excéntricos. Os dejo el último que han hecho

Si os ha gustado, aquí os dejo ESTE y ESTE

Kenny G

El instrumento más romántico en la boca de un maestro una tarde cualquiera de domingo

Y si tienes suerte...

El final de un relato cualquiera de una tarde cualquiera;

"Pero todo tiene un final y el de esa noche llegó de la boca del camarero que, entre una mezcla de celos y cansancio, nos dijo que había que abandonar el bar. Así lo hicimos. La acompañé hasta la puerta y me despedí de ella, cosa que no tomó muy bien. Me dijo que si estaba dispuesto a pasar otra noche más solo o si quería dormir en su cama. Casi me caigo al suelo.

Por supuesto, no cometí el error de aceptar la invitación. Me eché el farol del siglo para llevarme todo el bote. No quería sólo la mano, quería la partida. Le dije que no, que si quería seguir la cosa, la esperaba al día siguiente a la misma hora y en el mismo lugar. “Mañana si tienes suerte, a lo mejor hasta te beso”, le dije. Hoy, diez años después, le hago el amor cada noche antes de dormir".