viernes, 15 de junio de 2012

Carta a Ndugu

Antes de dormir, os dejo esta relfexión triste, muy triste, que hace Jack Nicholson en la película 'A propósito de Schmidt'. No la reflexionéis demasiado, que no son horas, ni épocas ni, sobre todo, no es forma de acabar un día.




"En cierto modo me hizo pensar: al contemplar esta historia y al reflexionar sobre lo que consiguieron esas personas hace tanto tiempo, uno ve las cosas con una nueva perspectiva. (...) Ya sé que somos como granos de arena en la inmensidad del universo y supongo que a lo máximo a lo que podemos aspirar es a dejar algún tipo de huella pero ¿qué huella he dejado yo? ¿en qué he contribuído a mejorar el mundo? (...) Soy débil, un fracasado... y no tengo ninguna excusa. Relativamente pronto, moriré. Tal vez dentro de veinte años, tal vez mañana... ¡qué mas da!. Cuando esté muerto y conmigo todos los que me conocieron, será como si nunca hubiera existido. ¿Aquién ha afectado en algo mi vida? a nadie que se me ocurra, a nadie en absoluto"