domingo, 24 de enero de 2010

Te cuento un cuento

Te voy a contar cuento distinto, sin príncipes ni princesas, sin sapos ni corceles, sin manzanas ni brujas, sin cerdos ni lobos feroces. Una historia en la que no hay guerras ni torres, o largas melenas doradas. No encontrarás tampoco soldados ni bailarinas, ni quiero que pienses que habrá golosinas ni ratones, ni tampoco flautistas de Hamelín. En este cuento no escucharás sobre piratas ni malvadas madrastras, no oirás mencionar caballeros ni reinos hechizados. La leyenda que te narro no sucedió en un lugar muy, muy lejano hace mucho, mucho tiempo; porque esto no ha pasado, va a ocurrir.

No habrá enanos ni gigantes, ni cisnes ni ratitas presumidas. No hay magos ni hechiceros, ni niños o niñas que se pierden en un bosque, ni habichuelas mágicas, hadas, flores, perros o gatos con botas.

Es más fácil que todo eso...

En este cuento sólo estamos tú y yo, todo lo demás, un "fueron felices y comieron perdices" y un punto final.