miércoles, 7 de octubre de 2009

Carta de un alumno a Rosa Cal

Antes de empezar, me gustaría mostrarle a todos aquellos que sois ajenos a la Facultad de Ciencias de la Información, quien es la profesora Rosa Cal. Esta ecantadora señora imparte la asignatura de Historia del Periodismo Universal en 5º curso y claro, con la suerte que tengo, este año me da clase a mi. Como no quiero que mis palabras suenen exageradas y penséis que soy un pesimista os dejo testimonios de otros estudiantes que podéis encontrar en www.elratotonto.info.

"Huye! Por mucho que estudies y te prepares la asignatura, acabarás con un 5 raspao (”aprobadillo”, como dice ella) en el mejor de los casos. De las que ponen gilipolleces que no vienen a cuento en las calificaciones de los tablones (tipo: “No sabe”, “Menos literatura y más estudiar”). En fin…"

"Esta mujer rompe los esquemas como profesora. Como si la vida la hubiese castigado, lo único que hace es pagarlo con sus alumnos. Con ella se suda la gota gorda hasta en pleno diciembre..y no solo eso…hay alguno que ha llorado sangre…asi que da por hecho que vas a suspender! te lo aconsejo! es una rompetitulos…mi carrera ha durado un año más gracias a su asignatura. no tiene compasión por nadie"

"Si eres del 99% de la población que no estudia todos los días, ni te plantees cogerla. Y si eres del restante 1%, ten por seguro que vas a sufrir para aprobar. Desgraciadamente, desde hace ya unos cuantos años, monopoliza todos los grupos de la tarde, con lo que un turno retrasado en la matriculación te puede obligar a enfrentarte a ella. En tal caso, será tu perdición, y retrasará tu licenciatura un año. Qué se le va a hacer…"

"La gota gorda vas a sudar… y aún así no vas a aprobar"

Hoy he ido a mi primera clase con Rosa Cal y ya se que voy a suspender. Por eso he decidido escribirle una carta para comentarle algunas cosas. De todas formas he puesto otro nombre por si acaso lo lee, que no sepa quien soy (jaja soy super listo)

Carta de un alumnos a la profesora Rosa Cal.
Estimada profesora:

Mi nombre es Manuel Guillamón y soy alumno suyo en la asignatura de Historia del Periodismo Español, en el grupo F del quinto curso de Periodismo en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad complutense de Madrid. Mi carta tiene un mensaje claro y explícito: quiero y necesito aprobar su asignatura. Se lo explico más detalladamente: Ya desde el año pasado llevo escuchando adjetivos hacia usted que me hacen pensar que es una profesora a la que podíamos considerar, digamos "dificil". Aunque la han definido de muchas maneras mucho menos ortodoxas, yo le doy un voto de confianza. No le comentaré nada sobre los improperios que han dicho mis compañeros de usted, pero creo que este año puede cambiar la fama de "puta vieja de mierda, ojalá y se jubile ya o directamente se muera" que ha ido adquiriendo durante todos estos años; y para cambiar esa fama, nadie mejor que yo. Por esto, le propongo un trato: sabrá usted que yo llevo una vida gloriosa en la que no conozco palabras como "estrés", "agobio", "apuntes" o "asistencia a clase"; también directamente he omitido de mi diccionario otros términos como "estudio", "tomar apuntes" o biblioteca" (este concepto específicamente me da repelus). Mi vida me gusta tal y como está, bien es verdad que puede que a otros no les parezca bien el ritmo de vida que llevo, pero para esas personas tengo una frase: que os den por culo.

Como le decía, me gusta mi vida y por eso quiero que siga así. Por esta razón y sin más preambulos le ofrezco un trato: yo puedo aportar sosiego y paz en su vida en estos, sus últimos años, siempre y cuando usted me apruebe y no haga como con otra gente a la cual ha dejado un año únicamente con su asignatura. Es fácil, yo hago mi exámen y usted me pone un "5", no pido más, ambos ganamos y todos felices. Si por el contrario (Dios no lo quiera) no lo hace, haré que su vida sea un infierno y conseguiré que desee lo que tantos y tantos de sus alumnos han deseado estos años: que se jubile de una vez. Asi que, ¿por qué no cedemos un poco todos y somos felices este curso?.

Atentamente un alumno que la quiere y la respeta

PD: Si intenta ir con esta carta al decano o a la policía que sepa que secuestraré a unos de sus trece gatos (más concretamente a Pulitzer) y lo asesinaré lenta y despiadadamente. Con cariño:

Manuel Guillamón Almela

martes, 6 de octubre de 2009

Como me hice la cicatriz (II)

Como ya todos sabéis, hace más o menos un año un terrible accidente dejó una marca en mi frente, y aunque he tenido que pasar muchas y muy peligrosas operaciones, por fortuna, sigo vivo.

La historia es traumática y escalofriante, pero por consejo de mi familia, amigos y doctores he decidido contarla hoy.

El que me conozca sabrá que una de mis aficiones es hacer surf. Amo ese deporte, la sensación de libertad que te provoca coronar una ola...
El año pasado fui a Hawai, donde me habían dicho que están las mejores olas del mundo. Allí tengo una pequeña casita a orilla de la playa


Mi casa en la playa



El caso es que tras unos días de relax en casa, decidí que ya era hora de encontrar esa ola que todo surfista busca, la llamada "ola perfecta". Eran sobre las 11 de la mañana cuando me adentré con mi tabla en lo profundo del mar. No pasaron más de diez minutos cuando por fin, tras casi veintidos años de vida, tomaba la mejor ola que nunca habia visto. Una marea cristalina, de incontables metros de altura, se posaba bajo mi tabla. Las miles de personas que se agolpaban para observarme en la orilla aplaudían como locas y yo me sentía libre y feliz. Sin embargo, aquel momento de felicidad extrema se vió empañado por un terrible suceso. Desde la cresta de la ola, divisé a lo lejos un terrible tiburón que se acercaba rápidamente hacia un pobre niño que, indefenso como un conejo en una zorrera, no sabía que su vida estaba en peligro


Pequeño Billy


Tiburón que atacó al pequeño Billy


Yo por supuesto, no podía permitir que aquella fiera salvaje hiciera daño a ese pequeño y, utilizando el impulso de aquella ola enorme, me deslicé como pez en el agua (me ha costado encontrar el símil) hacia lo que en unos segundos iba a ser una carnicería. El miedo se apoderó de la gente de la orilla que observaba como ese tiburón iba a devorar a Billy; las mujeres lloraban y gritaban, los hombres observaban con impotencia la tragedia que iba a ocurrir y la mamá de Billy (recientemente divorciada después de un matrimonio horrible) gritaba desconsolada


Madre del pequeño Billy


El feroz escualo abrió sus mandíbulas para devorar al niño que en ese momento se percató por primera vez del peligro, cuando de repente de la nada, salí yo y me abalancé sobre la bestia, emprendiendo una pelea a cara de perro (o de tiburón). Yo intentaba esquivar sus afilados colmillos y a la vez luchaba por aguantar el poco aire que, tras ocho minutos bajo el agua, quedaba en mis pulmones. Finalmente conseguí agarrar un coral que había en el fondo del océnao y que tenía forma de cuchillo (no exagero nada, lo prometo) y conseguí clavarlo en la cabeza del tiburón que, inmediatamente cayó muerto.

Tras recuperar el aliento, llevé al pequeño Billy a la orilla donde su madre nos esperaba ilusionada y extrañamente excitada. Sin embargo, el escualo no había dicho su ultima palabra y, tras dejar a Billy en los brazos de su madre, me atacó por la espalda. Con sus afilados dientes y tras pillarme por sorpresa, me hirió en la frente. Pero lo que él no sabía, es que yo aún tenia mucho que decir y que mis quince años de kárate me habian servido para algo. Con una destreza solo al alcance de unos pocos, le asesté la patada giratoria twon-ki-fu que lo destrozó por completo.

Aquella tarde me ingresaron de gravedad en el hospital donde logré sobrevivir de milagro. Al despertar y tras varias operaciones, solo quedaba en mí una cicatriz en la frente y la madre de Billy, que había aguardado toda la noche junto a mi cama y cogida de mi mano.
Una historia que tuvo un final feliz pero que pudo acabar muy mal.

Gracias por leerme

jueves, 1 de octubre de 2009

Ahora que empieza el verano...

Porque quien no ha soñado tener un verano así...yo desde luego me pongo malo cuando veo el video. Ahora que empieza el solecito, el calor y la playa a ver si lo aprovecho coño




PD: Cuando me pase todo eso quiero la musiquita de fondo tambien, eso que no falte

domingo, 27 de septiembre de 2009

Regusto Argentino

Hoy me acuerdo de vosotros. Como el regustillo que te queda después de saborear un delicioso caldo y que vuelves a deleitar en tu paladar horas más tarde, hoy me acuerdo de vosotros. Porque son aires que acarician diferente tu cara, son gustos distintos, son olores deliciosos, sonrisas, besos y abrazos excesivamente dulces; porque el ruido te lleva en volandas todo el día con ese acento que, o bien te resulta tremendamente agradable o directamente te mata al ser susurrado en tu oído. Porque tenemos a una de vosotros compartiendo la mesa como tantas veces hemos podido compartir nosotros la vuestra, hoy me acuerdo de vosotros. ¡Que bella tierra! ¡que linda gente! ¡qué hermoso país!



Me duele tanto el silencio por lo mucho que perdí. Que no se quede callado el que quiera ser feliz... Atahualpa Yupanki